Brasil y Perú se beneficiarían en exportaciones de carne y pescado por embargo ruso
El sector pesquero en Perú sería uno de los países beneficiados desde que la semana pasada Rusia embargó las importaciones de alimentos desde la UE y Estados Unidos en respuesta a las sanciones. Rusia decidió reanudar las importaciones de pescado de 18 fábricas de procesamiento en Perú, informó el diario El Clarín.
Brasil sería el principal beneficiado porque es el primer proveedor de carne bovina a Rusia, indicó El Clarín. Chile es otro mencionado como uno de los más beneficiados por el embargo ruso al pescado europeo, señaló el Diario Financiero.
Mientras varios países y grupos comerciales en Sudamérica han dicho que las medidas de Moscú podrían favorecer a sus mercados, la Unión Europea planea mantener conversaciones con países como Brasil y Chile en un intento por disuadirlos de intervenir para reemplazar sus exportaciones agrícolas restringidas por Rusia, comentaron funcionarios del alto rango de la UE.
Lo cierto es que el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) de Perú informó el viernes pasado que un grupo de empresas del sector pesquero fueron habilitadas para abastecer al mercado ruso.
Andina informó que el embajador de Perú en Rusia, Gustavo Otero, se reunió con el jefe del Servicio Federal de Inspección Veterinaria y Fitosanitaria de Rusia, Serguei Dankvert, con la finalidad de conocer las necesidades de demanda de alimentos en el mercado ruso. Dankvert se ha reunido en Moscú con embajadores de Argentina, Ecuador, Chile y Uruguay.
La SIAG también solicitó a Perú inspeccionar sus plantas de productos lácteos (leche condensada, queso, requesón) para ver si pueden acceder al mercado ruso.
Entre otros productos identificados figuran los pesqueros congelados, frutas (cítricos, uvas), hortalizas, tubérculos y nueces.
Sin embargo, las exportaciones deberán contar con los requisitos sanitarios rusos y la Unión Aduanera que está formada, también, por Bielorrusia y Kazajistán.
En tanto, Brasil ha autorizado alrededor de 90 nuevas plantas de carne para comenzar a exportar pollo, vacuno y cerdo inmediatamente a Rusia. “Rusia tiene el potencial para ser un gran consumidor de commodities agrícolas, no sólo de carne”, señaló Seneri Paludo, secretario de agricultura de Brasil, quien ha visto que podría exportarse más maíz y soya a Rusia..
Este entusiasmo en las potencias agrícolas de Latinoamérica ha despertado preocupación en Bruselas. “Estaremos conversando con los países que podrían potencialmente reemplazar nuestras exportaciones para indicarles que esperamos que no usufructen de forma injusta de la situación”, comentó uno de los funcionarios senior de la UE durante una sesión informativa sobre la situación en Ucrania.
La UE, como el mayor bloque comercial del mundo, puede ejercer presión a través de sus negociaciones con Mercosur, pese a que las conversaciones sobre un acuerdo comercial que ya llevan 15 años, han estado llenas de dificultades sobre el acceso a los mercados.
El funcionario dijo comprender que compañías individuales firmen nuevos contratos con Rusia, pero no vería igual a países. Otro representante aboga por conversaciones más “políticas”. Subraya la importancia de un frente internacional unido sobre Ucrania, antes que plantear objeciones a las exportaciones de alimentos.
En Europa, los diplomáticos probablemente protestarán por cualquier intento de llenar el vacío en las exportaciones de la UE. Turquía y Bielorrusia también esperan sacar beneficios de esta situación.